Cuando se logró determinar el lugar, los uniformados solicitaron al Juzgado la orden de allanamiento y requisa de las personas que lo ocupaban.
Entonces el viernes a la noche, los gendarmes con la presencia de los testigos convocados, irrumpieron en un domicilio de calle Mota Botello 1.342, donde detuvieron a la mujer.
Con la asistencia de personal femenino de la Policía provincial, se detectó que en el interior de una riñonera que tenía la sospechosa, había numerosas “bochas” que contenían un polvo blanco.
La sustancia fue sometida a las pruebas de campo, que arrojaron como resultado que se trataba de clorhidrato de cocaína.
Luego se registró el interior del inmueble, y los gendarmes encontraron otras bochas con la misma sustancia, como así también dinero en efectivo, que sería producto de la comercialización del estupefaciente, y también elementos de interés para la causa.