Aramburu admitió haberle aplicado un puntazo a su oponente, pero dijo no saber del resultado fatal, sino hasta el día siguiente, a través de los medios de prensa.
Pero el acusado insistió en que fue Herrera quien lo agredió, y que él solo apeló a un cuchillo que tenía entre sus pertenencias para defenderse.
Además, según la versión del acusado, Herrera también estaba armado con algún elemento contundente.
Después de la declaración, el abogado Luciano Rojas dejó pedido el cambio de carátula, a homicidio con exceso en la legítima defensa, lo cual significaría la posibilidad de la excarcelación para el acusado.