El sujeto vio el móvil y salió corriendo, por lo que se inició una persecución, que concluyó a las pocas cuadras.
Una vez reducido, fue trasladado a la dependencia, ya que además se comprobó que había intentado robar el estéreo del auto, pues la cerradura de la puerta esta forzada.
Antes de alojarlo en el calabozo, los policías requisaron al joven y debajo de la plantilla de una de sus zapatillas, hallaron un envoltorio con sustancia de color blanco.
Entones dieron intervención a la Dirección Drogas, cuyos efectivos determinaron a través de la prueba de campo, que se trataba de cocaína, por aproximadamente 4 gramos.