La causa se inició como consecuencia de las declaraciones de compañeras y amigas de Rocío durante la investigación del crimen por el cual está imputado Manuel Páez.
Las menores aportaron información respecto de la relación sentimental que unía al policía con la adolescente asesinada en octubre del 2006.
El oficial inspector Machado, marido de la madrina de Rocío, Liliana Sanna, habría cometido estos actos en innumerables ocasiones, y por ello el fiscal lo acusó de un delito continuado.