Silvio Luis Suárez, de 32 años, prestaba servicio en la Jefatura Departamental de San Martín, y fue asesinado en el barrio Calchaquí, de Quilmes, al sur del Gran Buenos Aires.
Tras el crimen, los asesinos -de entre 25 y 30 años- huyeron sin robar ninguna de las pertenencias de la víctima. (Télam)