Los fieles asistieron a una misa, realizada en el santuario de María Auxiliadora, en el complejo salesiano de Fortín Mercedes, donde los restos del beato descansaron durante 85 años, y si bien dijeron que respetaban la decisión del Vaticano, se mostraron enojados por las formas.
Los devotos pretendían contar con más tiempo para dedicarle una fiesta de despedida a Ceferino, aunque se enteraron el jueves de la semana pasada que este miércoles en horas de la mañana iba a comenzar el traslado de los restos a San Ignacio, donde está afincada la comunidad mapuche Namuncurá.
Así lo expresó en declaraciones a Noticias Argentinas el historiador aficionado José Luis Onorato, de Pedro Luro, quien agregó: "Esto estuvo muy mal manejado y hay mucha bronca en la gente, porque se resolvió entre gallos y medianoches (...) No nos dio tiempo a organizar nada."
A propósito, algunos de los fieles que se dieron cita en la despedida increparon al delegado del Arzobispado de Bahía Blanca Vicente Tirabasso.
"Se lo llevaron corriendo porque tenían miedo de que lo saquemos (...) Estamos muy dolidos, muy acongojados", dijo uno de los devotos, en declaraciones publicadas en la página web del diario La Nueva República de esta ciudad.
En la conferencia realizada anoche en el Descanso Ceferiniano de Fortín Mercedes, y de la que participaron miembros del grupo Ceferiniano, familiares del propio Ceferino y representantes del Arzobispado de Neuquén, Tirabasso lamentó la manera en la que se manejó este asunto.
El inspector salesiano reconoció que "hubo malentendidos que han generado mucho dolor", y añadió: "Fruto de un error en la comunicación, tuvimos algunos desencuentros que generaron malestar."
"Queremos pedir disculpas, porque no fue voluntad llevar las cosas por este carril", sostuvo el religioso, en alusión a las quejas por parte de fieles de la región.
De todos modos, Tirabasso destacó el clima de comprensión y paz que se registraba en el lugar, sobre todo al cabo de una reunión mantenida entre el grupo Ceferiniano, la familia del beato y representantes de la Iglesia.
El traslado de los restos de Ceferino, a quien le rezan los enfermos de cáncer en busca de curación, se inició alrededor de las 11:00 de la mañana, con destino a la comunidad mapuche de San Ignacio, en Junín de los Andes.
Custodiada por personal policial de las provincias de Buenos Aires y Neuquén, la salida de la urna fue tumultuosa, ya que unas 700 personas se acercaron para decir adiós a los restos del joven laico salesiano de orígenes mapuches y criollos, fallecido en Roma
el 11 de mayo de 1905.
En tanto, en Junín de los Andes, la llegada de la comitiva se manejaba con discreción, dado que sería deseo de los familiares mantener alejada del público la colocación de los restos en un monumento especialmente construido para honrar a Ceferino y
convertirse en su morada eterna.
El llamado "santito indio", cuyos restos fueron repatriados de Italia en 1924, nació en 1886 en Chimpay, Río Negro (donde fue beatificado en noviembre de 2007) y murió a los 18 años a causa de tuberculosis, en la capital de aquel país europeo.
Fuente/ 26noticias.com.ar
COMO LLEGAR A SAN IGNACIO
Por: NILDA el 30-11-2012 a las 10:41