El rápido crecimiento del mercado de esa ciudad, que esta semana celebra la decimosexta edición de su Festival Internacional de Cine de Shanghai, el más joven del mundo de clase A, se verá multiplicado por el parque Disneyland que abrirá en 2015 y el estudio local de DreamWorks, dijo el cónsul estadounidense, Robert Griffiths.
Shanghai cuenta ya, además, con el mayor número de cines del país, 122, adelante de los 120 que tiene Beijíng, y cuenta con "ventajas únicas, lo que sugiere que el mercado todavía tiene un margen significativo para seguir creciendo", dijo Rance Pow, presidente de Artisan Gateway, la firma responsable del estudio.
De hecho, además de contar con esas inversiones estadounidense, Shanghai cuenta con una larga tradición cinematográfica y está considerada la cuna del cine chino, donde se rodaron las primeras películas a partir de 1913.
Desde esos mismos años, uno de sus principales impulsores fue el español Antonio Ramos, que se convirtió en un magnate de las salas de cine en esa ciudad colonial internacional hasta que en 1927 regresó a España, donde construyó el cine Rialto de la Gran Vía madrileña, según despacho de EFE.
El estudio detalla que el sector del cine y la televisión contribuyó el año pasado a la economía de Shanghai, la región más desarrollada de China, con 8.700 millones de dólares y cerca de 70.000 puestos de trabajo.
Fuente: Télam