La entrada de divisas al país deprimió el precio del dólar en la plaza uruguaya, al punto de poner en riesgo algunos "equilibrios macroeconómicos" y afectar la competitividad exportadora, alegó Lorenzo.
Según señaló la agencia DPA, el objetivo es desalentar el ingreso de capitales "especulativos" al país, que llegaron en cantidades significativas después de que Uruguay recuperó el grado de inversión no especulativa (investment grade) a comienzos de 2012, explicaron las autoridades.
Uruguay también mantendrá el régimen de objetivos de inflación, pero en lugar de utilizar la tasa de interés como "señal instrumental", la misma serán los medios de pago circulantes en la economía, se anunció.
Además, desde agosto de 2014 el rango establecido como meta anual para la inflación será ampliado del actual nivel del 4 y el 6 por ciento, al 3 y 7 por ciento. El "horizonte" de dicha meta pasará a tener validez por los siguientes 24 meses, se informó.
En los últimos años la inflación en Uruguay superó el rango meta y en los doce meses cerrados en mayo se ubicó en el 8 por ciento.
Las autoridades uruguayas insistieron en que este paquete se trata de un "ajuste instrumental" de la política monetaria y dijeron que esperan que las nuevas medidas refuercen la "credibilidad" de la misma.
Fuente: Télam