La Autoridad Nacional Palestina (ANP) condenó el atentado perpetrado en la ciudad de Galilea, al norte de Israel, que causó al menos 10 muertos y 50 heridos, pero atribuyó al gobierno israelí la responsabilidad de la actual escalada de violencia.
Por su parte el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, urgió a todas las naciones a ayudar a "detener el terrorismo" contra Israel, tras tomar conocimiento de los atentados perpetrados hoy en Medio Oriente."La ANP condena el ataque de esta mañana contra un ómnibus, cerca de la ciudad de Safed", afirma el comunicado difundido hoy en Gaza, pero "entiende que el gobierno del primer ministro Ariel Sharon, realizando detenciones masivas, con medidas represivas y demoliciones de casas en las ciudades de Naplusa y Jenin, está creando las condiciones para la continuidad de esta serie de masacres".