La Empresa Nacional de Televisión encabeza este sábado un telemaratón, bajo el lema "Unidos ayudemos a nuestra gente", que espera reunir recursos para 57.000 familias afectadas por las inundaciones asociadas al fenómeno climático La Niña.
Esa iniciativa solidaria es impulsada por el propio presidente Evo Morales y se extenderá durante una semana para ayudar a la población de las zonas más dañadas por las intensas precipitaciones, entre ellas el norteño departamento de Beni, informaron las agencias boliviana, ABI, y cubana, Prensa Latina.
Según Defensa Civil, como consecuencia del temporal las amenazas de inundación que padece Trinidad, capital de Beni, disminuyeron gracias a las acciones preventivas, aunque cuatro provincias siguen completamente incomunicadas.
El reforzamiento del anillo que rodea Trinidad contuvo por ahora al río Ibare, ante cuyo eventual desbordamiento fueron evacuadas miles de familias que reciben ayuda humanitaria en sus campamentos.
Según datos oficiales, el número de muertos en Bolivia por los aguaceros ascendieron a 52 en las últimas horas.
Las medidas para paliar los daños que ocasiona La Niña tienen lugar en una semana signada además por el fracaso en el diálogo sobre el empleo del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH).
Tras la séptima reunión entre asesores técnicos del gobierno boliviano y las nueve prefecturas, una comisión económica mixta busca sin éxito una solución equitativa a la redistribución de los recursos del IDH para sufragar una pensión vitalicia a la vejez boliviana.
En las cinco primeras reuniones participaron representantes de los nueve departamentos, quienes coincidieron en la necesidad de pagar ese beneficio, aunque con diferencias sobre su fuente de financiamiento.
La llamada Media Luna (Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija) abandonó el diálogo el 30 de enero, en rechazo a la decisión gubernamental de pagar dicho beneficio con recursos del IDH, alegando supuestas afectaciones a proyectos regionales.
El Ejecutivo flexibilizó su proyecto y propuso la creación de un fondo de compensación, el ajuste del decreto sobre la redistribución del IDH y donar 100 millones de dólares a las prefecturas.
Los delegados departamentales respondieron con alternativas que fueron difíciles de sostener en el tiempo, como el uso del Impuesto a las Transacciones Financieras y de las reservas internacionales.
En reunión previa, el gobierno presentó una alternativa mixta que facilitaba a las prefecturas 150 millones de dólares para compensar la redistribución de su presupuesto.
Por otra parte, el ejecutivo anunció que agilizará la realización de sendos referendos sobre la nueva carta magna ante el boicot opositor al proceso de diálogo nacional.
La nueva constitución tiene pendiente una consulta para dirimir la extensión máxima de los latifundios, y otra para ratificar el texto aprobado en diciembre último por la Asamblea Constituyente.
El caso es que los prefectos opositores habían emplazado hasta este último jueves al gobierno para que se avenga a aceptar sus propuestas, caso contrario iniciarían medidas de fuerza, pero fue postergada por las inclemencias de las inundaciones que hizo que el gobierno declarara el estado de desastre y la discusión sigue abierta.(Telam)