Uno de los sospechosos, Michael Adebowale, había sido acusado formalmente de homicidio esta semana, mientras que el segundo, Michael Adebolajo, fue acusado hoy de homicidio y también de tentativa de asesinato contra dos policías, informaron hoy fuentes policiales, citadas por medios británicos.
A partir del asesinato del soldado se produjeron en el Reino Unido 212 agresiones religiosas, incluyendo el ataque a 11 mezquitas, según la organización interreligiosa "La Fe importa".
En ese marco, el Partido Nacional Británico (BNP), de ultra derecha, realizó frente al Parlamento, en el centro de la ciudad, una concentración anti islámica bajo la consigna "Fuera los predicadores del odio".
"Los musulmanes tienen un estilo de vida y una forma de ver el mundo que es absolutamente incompatible con la nuestra", comentó a la prensa el líder del BNP, Nick Griffin.
Este político, miembro del Parlamento Europeo y con un prontuario en la justicia por incitar el odio étnico, dijo que cuando la comunidad islámica "se entrena para ir a la guerra contra los no creyentes, no están siendo extremistas, sino están cumpliendo lo que les dice el Corán".
"Las 12 miles de millones de libras que este gobierno está gastando cada año en ayuda internacional debería destinarse a que la población musulmana del Reino Unido se vaya a países musulmanes", propuso.
"Somos cristianos y este un país cristiano, si no les gusta pueden irse a algún país islámico", comentó a Télam Steven, uno de los manifestantes.
A 30 metros, separados por un nutrido cordón policial, partidos políticos de izquierda, sindicatos y organizaciones como Occupy London y Anonymous hicieron su contramarcha, mucho más numerosa.
"El BNP es un partido fascista que está fomentando el odio contra los musulmanes y estamos aquí para oponernos al racismo y no permitir que el odio se extienda", comentó a esta agencia Miguel Sanz, un sevillano que vive en Londres.
"Los fascistas se visten hoy de traje y se presentan como un partido democrático, pero son nazis", añadió su compañero, Helios Alonso, un uruguayo que también hizo de la capital inglesa su segunda casa.
"Es gente que busca respuestas fáciles a la crisis, culpando a la inmigración, cuando deberían estar culpando a los bancos y las grandes corporaciones", comentó Mel y agregó que en su barrio, al noreste de Londres, "hay una enorme comunidad musulmana que estaban tan horrorizados como todos por el asesinato de Lee Rigby".
Durante las concentraciones hubo momentos de tensión, con enfrentamientos a golpes entre ambas facciones y choques con la policía cuando intentó despejar el área.
Con menos violencia, también hubo marchas y contramarchas en otras ciudades británicas como Sheffield, Birmingham, Cardiff, Ipswich y Coventry.
En estos casos estuvieron organizadas por la asociación nacionalista Liga de Defensa Inglesa (EDL), que realizaron "caminatas silenciosas" para homenajear al soldado asesinado.
Este grupo realizó en la última semana dos marchas anti islámicas en Newcastle y Londres con cánticos como "asesinos musulmanes fuera de nuestras calles".
Fuente: Télam