La ciudad más afectada es Nova Friburgo, con 155 muertos. En ella un gimnasio ha comenzado a ser usado como morgue. Con barrios enteros bajo el lodo, Brasil vive la peor catástrofe natural de su historia.
Tres de las víctimas eran miembros de un equipo de bomberos que participaba en los rescates y fueron sepultados por los escombros de un pequeño edificio que se vino abajo, anuncia la agencia EFE.
Carlos Turdera, periodista brasileño, en diálogo con el programa Cada Mañana, por Radio 10, aseguró que "la municipalidad de Teresópolis confirmó que el número de muertos ascendió a 146" en esa localidad.
En la localidad serrana de Teresópolis fundada en 1891, a 91 kilómetros de la ciudad de Río de Janeiro “es la mayor catástrofe en la historia de Teresópolis”, declaró el secretario del Ambiente del estado de Río de Janeiro, Carlos Minc, una afirmación en la que coincidió el alcalde de esa localidad, Jorge Mário Sedlacek, quien apuntó que el rescate deberá continuar durante algunos días.
"No hubo distinción entre pobres y ricos a la hora de caerse las casas. Se vino todo abajo", declaró a medios locales una mujer que logró escapar del derrumbe de la vivienda que ocupaba en la ladera de un cerro en Teresópolis.
Mientras, en Petropolis y en el Valle de Cuiabá, perteneciente a Itaipava, el último recuento difundido por medios del país situó en 35 las víctimas mortales. Defensa Civil, con más de 800 miembros trabajando en el rescate, divulgó cálculos iniciales que hablan de por lo menos 50 desaparecidos. Además, muchos de los barrios de las ciudades afectadas permanecían incomunicados por los derrumbes y los socorristas intentaban abrirse paso entre toneladas de barro para ayudar a las víctimas e iniciar la búsqueda de cadáveres.
Cabral dijo que conversó telefónicamente con la presidenta del país, Dilma Rousseff, quien se comprometió a enviar "toda la ayuda disponible" en forma urgente y además, según fuentes oficiales, ha decidido liberar unos 700 millones de reales (cerca de 412 millones de dólares) del presupuesto nacional para atender la emergencia.
En Sao Paulo, la situación más crítica se presentaba en la ciudad de Franco da Rocha, cuyo casco urbano seguía totalmente inundado hoy por las lluvias caídas este martes, donde se registraban más de 13 muertos.
El Gobierno argentino puso hoy "a disposición" de las autoridades brasileñas "la ayuda inmediata y los elementos que se estimen necesarios proveer".
Argentina transmite "su solidaridad al Gobierno y pueblo de Brasil y las más sentidas condolencias a los familiares de las víctimas, ante las lamentables consecuencias producidas por las lluvias", indicó un comunicado de la Cancillería.(Infobae)