La ausencia de la víctima en el juicio, terminó de alguna manera jugando a favor de los acusados, ya que no se pudo interrogar al principal interesado en la causa, respecto a los hechos de esa noche.
Teniendo en cuenta que no se pudo probar la intención directa de matar, el fiscal modificó además la acusación en contra de Ricardo Fabián Ríos, autor material de los disparos, de homicidio en grado de tentativa a abuso de armas, y por ello pidió para él una pena de 3 años de prisión en suspenso.
Ello significaría que el acusado puede recuperar la libertad mañana después de la sentencia, si el tribunal concuerda con el pedido del fiscal.
A su vez Silva Molina pidió que Walter Rasjido sea sentenciado a tres años en suspenso por un robo cometido en un telecentro, y la absolución por un hurto.