La denuncia de Maroto, uno de los integrantes del Poder Judicial provincial que más encontronazos ha mantenido con los propulsores de la denominada "mano dura", fue radicada ante el juez federal de San Isidro Conrado Bergesio.
De acuerdo con la presentación, el camarista se enteró de la existencia de un plan para secuestrarlo a través de datos "muy concretos" que le acercó una persona que concurrió a su despacho de la Cámara Penal de San Isidro. (Télam)