Este es el episodio más grave ocurrido en Pakistán desde que comenzó la guerra contra el terrorismo hace nueve meses.
Los militares murieron este martes durante un ataque en una casa, de la que se sospechaba era un escondite de fugitivos, en una aldea vecina a Wana, capital de la región tribal del Waziristán meridional, a una decena de kilómetros de la frontera afgana, anunciaron fuentes oficiales paquistaníes en Islamabad.
El tiroteo duró horas y un checheno, presuntamente miembro de Al Qaeda, fue detenido.
La operación habría sido realizada con la ayuda de la inteligencia norteamericana, pero soldados de Estados Unidos que se encontraban a un kilómetro de distancia no tomaron parte.(Télam-SNI).-