Turistas provenientes en su mayoría de Rosario, Córdoba, Buenos Aires, Neuquén, Tucumán, Chaco, La Rioja, Catamarca, Salta, que incluso se trasladan en vehículos particulares.
El engranaje turístico se puso a andar y sus beneficios se derramaron en todos los servicios de los que hacen uso en su corta estadía en la ciudad, desde algún servicio de guía, un taxi, la compra de comestibles y de artículos regionales.
Los dos circuitos más visitados fueron la Ruta del Adobe, que sigue siendo un emblema tan buscado como promocionado en esta zona, pero que aún no ha logrado desarrollar el valor agregado que estos lugares pueden tener. Por ejemplo, que alguien del lugar pueda contar la historia o que venda el recuerdo de una réplica del sitio para que lo lleven como presente de que estuvieron allí.
Desde las esferas oficiales de turismo municipal deberán trabajar para la próxima temporada en generar alternativas artísticas, culturales y recreativas a fin de lograr que los turistas no solo vuelvan a dormir en la ciudad sino que haya más que ofrecerles.
GENTILEZA: vocesescritas.com.ar