En el comedor Los Palacios, frente a la plaza de Tinogasta Corpacci le pegó duro a la actual gestión de gobierno, pero lo más importante del discurso fue la enunciación de los ejes de la alternativa de gobierno que busca representar.
Básicamente resaltó que canalizará los esfuerzos de gobierno y los enormes beneficios que se reciben en coparticipación y transferencias federales con un criterio de mayor sensibilidad social orientándolos a poner los cimientos de un estado de bienestar más preocupado por las necesidades de los hogares y el crecimiento humano.
Hizo una comparación con la administración de un hogar y dijo que primero “hay que preocuparse por el bienestar de los que viven en la casa, su salud, su educación, los servicios y después las grandes obras de incierta rentabilidad y beneficio para el pueblo”, y mencionó la hostería de Cortaderas, la Polo Gimenez y las obras que solamente contentan la vanidad y el ego de Brizuela del Moral.
Con esta confesión Lucía ya está en carrera y toda la militancia social y política que adhiere al proyecto de transformación iniciado por Néstor Kirchner se encolumna detrás de su figura para poner a Catamarca definitivamente en el camino del cambio democrático y popular por el que optó la mayoría en nuestro país y cuyos frutos ya son una realidad en la vida cotidiana de los argentinos. (Catamarca se Levanta)