Voceros del Ministerio explicaron que a partir de ahora el conflicto dejó de ser de índole "laboral" y pasó a ser un delito (el corte de vías que realizan los manifestantes a la altura de Avellaneda).
Durante las negociaciones, los funcionarios no reconocieron a ex trabajadores que exigen su reincorporación, sino identificó a integrandes del Partido Obrero que buscan ingresar como empleados a la firma concesionaria.
Según explicaron fuentes de la negocación, tampoco reconocieron a los manifestantes como integrantes de la nómina de trabajadores tercerizados que habían firmado un acuerdo con el Gobierno en la primera semana de noviembre tras la muerte de Mariano Ferreyra.
Pese a ello, el Ministerio les ofreció que realicen una tregua en las protestas y que se abra una ronda de diálogo durante la semana que viene para buscar una solución al conflicto.
Sin embargo, los manifestantes exigieron la incorporación inmediata de 60 trabajadores y el pago en el día de hoy de un salario promedio de 3000 pesos, algo a lo que el Ministerio se opuso. (Infobae)