Los pequeños emprendimientos destinados fundamentalmente al autoconsumo familiar se convirtieron en una de las posibilidades de mayor auge en la provincia, ya que se encuentran en el marco de una organización orientada a difundir las plantaciones familiares, escolares y vecinales, integrada por 270 unidades. El programa proporciona regularmente alimentación a mas de 10.000 personas en los barrios de los sectores norte y sur de esta ciudad Capital.
Según lo especificado por el coordinador del Programa, Hugo Pereyra, la demanda de producción es "extraordinaria", por lo que se analiza la instalación de 100 huertas más que serán distribuidas en distintos barrios de la ciudad.
Alrededor de 25 personas trabajan en el programa -entre becarios y técnicos del Ministerio- supervisando el trabajo que se ejecuta en predios reducidos y a un costo muy bajo.
Este plan promueve también el surgimiento de empresas productivas locales y la conciencia en el hábito de la alimentación sana y en la cultura del trabajo.
El objetivo que presigue el programa "Huertas Comunitarias, Asociativas y Familiares" es ayudar educar, alimentar y devolver a los sectores más débiles del cuerpo social la confianza en su capacidad y en su esfuerzo, junto con las virtudes cardinales de la previsión y del método.
La solidaridad y la dedicación pueden hacer mucho para superar las injustas estrecheces de este momento. El éxito del programa de huertas familiares instrumentado desde abril marca un camino y define una actitud de la que cabe esperar un cambio importante para el futuro social catamarqueño.
(Prensa y Disfusión)