La historia es más o menos conocida: reprobados Los Pumas en general y el pateador Felipe Contepomi en particular, su compañero Albanese se despachó con una revelación que no dejó lugar a interpretaciones ambigüas: "Jugamos por nosotros, y si la gente silba, es su problema".
Y aunque después ofreció aclaraciones y disculpas, publicadas el miércoles por el diario deportivo Olé, es cuanto menos discutible que poseído por un momento "de calentura" alguien diga algo diametralmente opuesto a lo que en realidad piensa, o ve con relativa simpatía. (Télam)