"Allí se instaló una pantalla gigante (de 18 metros cuadrados), con un telón especial para transmisiones diurnas al aire libre, sobre la plaza del Lido, como la que está montada en la calle Alzira Brandao de Tijuca", un barrio de clase media de la zona norte de la ciudad, explicó el organismo.
Como en la calle tijucana, Riotur contrató a 12 "passistas" (bailarines de samba), además de percusionistas de las escuelas de ese ritmo para animar a los hinchas.
"Nuestra expectativa es de una asistencia de 20.000 personas", dijo Ricardo Ferreira, uno de los organizadores de la fiesta.
Las autoridades de todos los niveles -municipal, provincial y federal- ya anticiparon que el lunes no será feriado aunque Brasil conquiste el tan soñado pentacampeonato, para aventar rumores que corrían por la ciudad desde ayer.
"El lunes será un día normal de trabajo", confirmó el alcalde carioca, César Maia, al periódico O Dia. "El domingo ya es un día sin trabajo y tendremos 14 horas para festejar", precisó el funcionario.
Según Riotur, varios equipos de emisoras extranjeras de televisión cubrirán la final de la Copa del Mundo en los principales puntos de concentración de la ciudad, entre los cuales se cuenta el lejano barrio de Bento Ribeiro, donde nació Ronaldo, hasta ahora el máximo anotador del mundial.
En el centro histórico de la ciudad, el tradicional cine Odeon abrirá sus puertas para recibir a los hinchas que quieran ver el cotejo en su pantalla.
Todo lo que está previsto para Río de Janeiro se extenderá a las grandes ciudades brasileñas, cuya población vive la expectativa de que Brasil alcance su quinto título mundial, el "penta" como suelen decir los fanáticos.
En Brasilia, los bomberos ya están preparando la carroza para un desfile por su gran avenida, el Eje Monumental, si conquistan el título. Será la misma que transportó a los tricampeones mundiales de México 70. (Télam-SNI).