El cierre se produjo anoche, horas después que los estibadores reanudaron su trabajo tras un cierre por 36 horas de los puertos decidido por las compañías marítimas, que estimaron que los trabajadores disminuían deliberadamente su ritmo de labor debido a un conflicto con sus empleadores, por la negociación de un nuevo contrato.
Los trabajadores portuarios habían vuelvo a sus puestos en la mañana de ayer, pero unas horas después de la reapertura de los puertos las compañías ordenaron un nuevo lockout, acusando nuevamente al Longshore and Warehouse Union (ILWU), el sindicato que reúne a 10.500 estibadores, de disminuir deliberadamente el ritmo de tareas tras su regreso al trabajo.
( Télam-SNI)