Según explicó esta mañana un vocero de los trabajadores, "la medida de fuerza se dispuso a raíz de sucesivos incumplimientos por parte del grupo empresario que compró la bodega mendocina a sus dueños originales".
La deuda varía según el caso entre siete y ocho meses de sueldos, y el desencadenante habría sido la falta de cumplimiento de la empresa de un acuerdo firmado con los empleados para saldar parte de esa obligación mediante un plan de pago de 100 pesos semanales.