El hecho de crueldad animal tuvo como protagonista a Justo Tobares, quien actualmente cumple arresto domiciliario, tras ser condenado por la justicia pampeana a once meses de prisión por someter a maltratos y prácticas de zoofilia a una perra en 2009, en su domicilio ubicado en el Barrio Lowe Che de la vecina localidad de Toay.
Del hecho fueron testigos un grupo de albañiles que se habían encariñado con la perra que estaba abandonada, a la que alimentaban a diario cuando iban a la obra ubicada cerca del domicilio de Tobares y precisamente ellos formularon la denuncia.
Fuente: Télam