Así lo revelaron profesionales que cumplen tareas en el mencionado centro asistencial, quienes pidieron mantener en reserva su identidad, quienes también indicaron que muchos de los casos son complicados por el deterioro general de su organismo que presentan estos pacientes.
“Esto comenzó a verse a partir de septiembre, que es cuando se corroboraron los casos, ya que se trataba de pacientes que repitieron las consultas y que a causa de ello comenzó a hacérseles estudios más precisos para determinar el origen del problema que presentaban”, indicaron.
Una fuente del servicio de enfermería, confirmó que los jóvenes con este problema, comenzaron a llegar con fuertes gastritis que se transformaron en hemorragias estomacales, por lo que se les hicieron ecografías y otros estudios que determinaron la raíz del problema.
“Esto seguramente no es de ahora, sino que recién ahora los chicos comienzan a sentir los síntomas producidos por el constante consumo de bebidas alcohólicas. Hoy vienen mal luego de tomar un par de cervezas, pero ese no es el origen de su problema, sino que ya vienen con un consumo constante de bebidas blancas y otras mezclas, que comienza en el invierno”, especificaron.
En la calle
Sobre el origen de los jóvenes que comenzaron a llegar con estos síntomas, si bien reconocieron que los problemas con el alcohol lo manifiestan chicos de todas clases sociales, admitieron que los primeros casos fueron de adolescentes que se dedican a limpiar vidrios y pedir monedas en las esquinas céntricas de la ciudad.
“Muchas veces estos chicos piden diciendo que es para comer, pero lo primero que hacen es comprar bebidas alcohólicas. La mayoría es reincidente, y cuando se les hacen los estudios se comprueba que están quemados por el alcohol, y que en muchos casos no tienen solución, porque deben cambiar de vida y no lo hacen”, lamentaron.
Sin embargo, confirmaron además que no sólo estos muchachos son los que llegan con este tipo de problemas, sino que “hay chicos de familias de buena posición a los que se los ve seguido por el servicio”.
“Vienen muchas chicas especialmente, en total estado de ebriedad. Por lo general las traen sus propias amigas o con quienes estuvieron bebiendo, y no quieren que se les avise a los padres. Creen que aquí se les dará un medicamento y se les pasará la borrachera. Quieren que se las atienda rápido para irse en mejores condiciones a sus casas, pero a veces hay que colocarles algún suero por el estado en que llegan”, relataron.
Mezclas
Por otro lado, los profesionales de la salud, indicaron que no es común que chicos de esta edad presenten problemas serios por consumo de alcohol, pero esto se da como consecuencia de una serie de factores.
“En principio hay que hacer notar que se trata de chicos que por lo general no se alimentan bien, y eso ya les da un mayor riesgo. Otro de los puntos, es que mezclan el alcohol con otras sustancias, como pastillas o energizantes, aunque esto en menor medida”, ampliaron.
Entre otras de las consecuencias que según los profesionales sufren los adolescentes y jóvenes por el excesivo consumo de alcohol son los psicológicos, ya que muchos son derivados al gabinete especial que funciona en el Hospital Regional.
“Muchos de los chicos que padecen estos problemas nos cuentan cosas terribles de sus vidas, y éso nosotros las transmitimos a los profesionales del gabinete psicológico de adolescentes para que tomen los casos y busquen alguna solución”, relataron.
En este sentido, dijeron que lo más común son los casos de abusos que sufren en sus propios domicilios “por eso también es que viven prácticamente en la calle y no quieren volver, o cuando lo hacen van borrachos o drogados”.
Fuente: elliberal.com.ar
