Cafiero, quien reemplazó como ministro de Justicia y Seguridad bonaerense a Luis Genoud, sostuvo que las protestas sociales "no son una amenaza a la seguridad pública", y evaluó que "hay que mantener el diálogo" y que la policía "debe actuar en forma preventiva, con inteligencia y con capacidad de comprensión ante las circunstancias sociales".
El nuevo funcionario se negó a dar precisiones sobre cómo se prepara la fuerza policial y el gobierno bonaerense ante la marcha piquetera que se realizará mañana, en repudio de la represión policial del miércoles último, que provocó la muerte de dos desocupados. "Ningún funcionario provincial va a hacer declaraciones creando un clima ante una movilización de esas características", afirmó Cafiero.
Solá, en su discurso después de tomar juramento a Cafiero, destacó que su gobierno "nunca abrió la boca para crear ningún clima de represión" en los días previos al miércoles porque creyó que se trataría de un nuevo corte, algo más difícil por la posibilidad de mayor violencia y nada más".
"No vamos a escalar la violencia, vamos a apoyar el orden público pero no vamos a escalar la violencia. Es la responsabilidad central del Estado hoy, no escalar la violencia próxima y mantener el lugar del Estado, el de la cordura, de la razón, cuando el Estado pierde la razón, no hay nada que hacer",enfatizó.
Por su parte, el flamante ministro Cafiero afirmó que la seguridad pública "debe estar el servicio del estado de derecho y la libertad".
"Debemos ser herederos y garantes del `nunca más` en la Argentina y en la provincia de Buenos Aires", dijo Cafiero en su discurso tras prestar juramento en su cargo, en la Casa de Gobierno bonaerense.(Télam)