En este sentido, graficó: "Para que tengan una idea, la Nación se lleva de Córdoba el equivalente a dos autopistas Córdoba-Rosario, y es una situación injusta. Y yo, como gobernador y defensor de mi provincia, la planteo como corresponde".
En el acto que realizó ayer con la Presidente, Schiaretti recibió duras críticas por parte de Cristina Kirchner, quien resaltó los recursos que la administración nacional destinó a la provincia mediterránea desde 2003, cuando asumió Néstor Kirchner, hasta la actualidad. Puntualmente, destacó que el año pasado Córdoba recibió más de $28.000 millones por parte de la Nación, en todo concepto.
Por otra parte, el cordobés calificó de "antidemocrático" el rechazo que recibió de algunos militantes kirchneristas que lo silbaron durante el acto y los adjudicó a "barrabravas". El mandatario afirmó que, por ese motivo, pedirá al Partido Justicialista cordobés que ya no movilice a militantes en una futura visita de la Presidente a la provincia por las "agresiones" en el acto de ayer.
"No nos molestan los silbidos, pero este acto de intolerancia no puede existir", señaló esta mañana Schiaretti en el Instituto Superior Amadeo Sabattini de la ciudad de Córdoba, donde presentó un programa educativo. "No vamos a movilizar más a la gente en los actos porque somos agredidos por los barrabravas y también para que no haya dificultades", agregó.
También hubo silbatinas para José Manuel De la Sota, que asistió en forma virtual al acto porque estuvo en Laboulaye conectado por videoconferencia. Al respecto, el mandatario negó que haya un acuerdo del PJ local con el kirchnerismo para las elecciones a gobernador del 7 de agosto, en la que se espera que De la Sota sea el candidato del oficialismo.
"No sé quién pone en los medios que De la Sota tiene un acuerdo con el kirchnerismo", dijo Schiaretti. Mientras tanto, el intendente capitalino Daniel Giacomino se mostró esta mañana más favorable a un acuerdo del PJ con el kirchnerismo local. (Infobae)