El lunes pasado, personal de este museo realizo la excavación para retirar la pieza los que le demando toda la jornada, además se tomaron los registros pertinentes “es una urna para niño, el estilo es un tanto particular y como no tenemos material comparativo con este tipo de pieza, no podemos dar una cronología demasiada precisa” estimándose una antigüedad de unos 1.200 años.
La pieza arqueológica sufrió presiones, se estiman que cuando se extrajeron los áridos el camión habría pasado sobre ella o la gente, “la palada que se le dio y ocasionó el descubrimiento, hizo que se fracturara en el lugar in situ, lo que no nos permitió recuperarla en una sola pieza” al tratarse de fragmentos grandes es “factible remontarlos acá en el museo” comento el profesional.
En el interior de la urna se pudo apreciar huesos de un infante “que por las dimensiones de los huesos, es un niño muy pequeño de más o menos dos años de edad” explicó.