Se trata de un honor tan inesperado como polémico para el hombre que durante toda la epopeya de los Rolling Stones encarnó la célebre trilogía "sexo, droga y rock and roll", antes de convertirse más tarde en un temible hombre de negocios, amante infiel y padre severo.
Jagger había tenido que aceptar que, antes que él, Paul McCartney, Elton John, Cliff Richard y otros fueran invitados al palacio de Buckingham para que, en la histórica ceremonia de ser tocados en el hombro con una espada por la reina, fueran convertidos en caballeros.
Si bien en 1977 declaró que "junto con la reina, soy uno de los mejores productos de Gran Bretaña", hoy, tras cuatro matrimonios, siete hijos y ya como abuelo, el veterano del rock se tomó el nombramiento con humildad: "Estoy muy feliz. Es un honor".
Pero que el "abuelo del rock británico" (según el "Daily Telegraph") vaya a ser "Sir" está creando polémica.
Algunos señalan que el "evasor de impuestos" Jagger, al contrario que Bob Geldof, Sting o Bono, nunca ha hecho algo por motivos caritativos.(Télam-SNI)