El equipo argentino fue levemente superior por el trabajo de Cristian Giménez, pero tanto Carlos Tévez como Héctor Bracamonte fracasaron en las oportunidades que tuvieron para convertir.
Los dos equipos salieron al campo de juego con camiseta azul, pero recién a los dos minutos el árbitroestadounidense Kevin Perry se dio cuenta de ese detalle y le ordenó a los jugadores de Boca que fueran a cambiarse la indumentaria.
Sin embargo, el equipo argentino adujo que no tenía otro juego de camisetas y entonces fueron los jugadores del América los que tuvieron que ir al vestuario a cambiarse la ropa y después de cinco minutos, regresaron al campo con la tradicional casaca amarilla.
El árbitro Perry volvió a convertirse otra vez en protagonista a los siete minutos del segundo tiempo, cuando insólitamente le anuló un gol al América después de que un remate del argentino Hugo Castillo pegará en el travesaño, luego en la espalda del arquero Roberto Abbondancieri y la pelota ingresara en la valla.
Sobre el final del encuentro hubo un connato de agresión entre los jugadores, pero la rápida intervención de los respectivos cuerpos técnicos impidió que el hecho pasara a mayores.
El plantel de Boca Juniors estará mañana, otra vez, en Argentina y el viernes se entrenará en el predio de Casa Amarilla.