"La imagen de Sánchez está muy lejos de la que yo creo debe tener un árbitro. Además, a cualquiera que estuviera vinculado con el fútbol uno le preguntaba antes del mundial a quien pensaba que se podía designar y nadie daba su nombre. Creo que Elizondo tiene todo el derecho de sentirse dolido por no haber sido nombrado. Había hecho mucho mas méritos para ello", consideró Castrilli.
El ex árbitro opinó que "evidentemente lo de Sánchez fue una recompensa, entre comillas, por haber hecho lo que le mandaron".
Al mismo tiempo, Castrilli volvió a reiterar que se alejó del arbitraje argentino porque "no podía aceptar a una autoridad que daba instrucciones nefastas para la formación de los árbitros", en clara alusión a Jorge Romo, del Colegio que nuclea a los jueces. (Télam)