Las FARC "dispararon explosivos terroristas desde el lado del hermano país; esto se instruye claramente y se le presenta a consideración a Ecuador y a la OEA, de acuerdo con lo convenido en el Grupo de Rio y con lo convenido en la OEA", dice una breve declaración de Uribe publicada por el sitio Web de su gobierno.
El jefe del Ejército colombiano, general Mario Montoya, aseguró este sábado que a las 11.15 del viernes, guerrilleros de las FARC lanzaron cilindros-bomba desde la zona de Puerto Nuevo, en Ecuador, hacia Teteyé, en Colombia, y causaron heridas a un soldado.
Puerto Nuevo y Teteyé están separadas por el río San Miguel, que delimita la frontera entre ambos países y, según Montoya, los proyectiles explosivos fueron lanzados desde 350 metros hacia un sitio en el que militares colombianos brindaban seguridad a un grupo de ingenieros petroleros que realizaban estudios del suelo.
El comandante de la Sexta Brigada del Ejército, general Jorge Ardila, afirmó que fueron lanzados ocho artefactos, de los cuales explotaron cinco y que al revisar los tres que no detonaron "se pudo establecer que son de fabricación ecuatoriana", según reportó la agencia noticiosa alemana DPA.
Mientras tanto, el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS, servicio secreto) difundió un video en el que dos presuntos desmovilizados de las FARC relatan cómo esta organización efectúa ataques contra el Ejército colombiano desde Ecuador, supuestamente con apoyo de las autoridades de este país.
Sin embargo, el Ejército de Ecuador aseguró que mantiene la zona bajo control y que el viernes sus tropas "escucharon detonaciones y disparos de armas automáticas, producto de combates", en territorio colombiano, según reportó el diario quiteño El Comercio.
La IV División del Ejército ecuatoriano sostuvo que desde el 13 de este mes realiza "a lo largo de los ríos San Miguel y Putumayo", en la frontera con Colombia, operativos de "control de vías, patrullajes y retenes fluviales, además de reconocimiento terrestre" y "reconocimiento aéreo con helicópteros de ataque".
"Mientras unidades de la IV División realizaban una operación de control de fronteras en el área de Puerto Nuevo y Los Diamantes, escucharon que en territorio colombiano, en el corregimiento de Teteyé, existían detonaciones y disparos de armas automáticas, producto de combates", señaló el reporte oficial.
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, no se había pronunciado al respecto hasta esta tarde, pero ayer, en el programa de radio que habitualmente conduce los sábados, reiteró su opinión de que las FARC "no son interlocutores válidos" pero "tampoco terroristas".
No obstante, advirtió que tampoco las considera como una fuerza beligerante, porque para ello "deben cesar los secuestros y todo acto que se pueda calificar como terrorista, respetar los códigos de guerra, los tratados de Ginebra, tener un territorio controlado y un ejército organizado, tal como lo establece el derecho internacional".
Correa ratificó que su posición "es y seguirá siendo no involucrarse en el Plan Colombia", concebido por el gobierno de Estados Unidos para brindar ayuda financiera a países latinoamericanos para el combate a la guerrilla y el narcotráfico.
El mandatario volvió a criticar a su colega colombiano, del que dijo que "quiere que todo el mundo siga su política" y a quien recomendó: "Señor Uribe, mande en Colombia. Aquí vamos a mandar los ecuatorianos. No vamos a aguantar a ningún señor con ínfulas de emperadorcito”.
Colombia y Ecuador mantienen rotas las relaciones diplomáticas a raíz del bombardeo de tropas colombianas a un campamento de las FARC en suelo ecuatoriano, el 1 de marzo pasado, que causó 25 muertos, entre ellos el segundo jefe de la organización guerrillera, Raúl Reyes.
El episodio causó la intervención de la cumbre del Grupo de Rio, que se reunió el 7 de marzo en Santo Domingo, y de la OEA, que llamó a una reunión urgente de los cancilleres de la región y envió a ambos países una misión encabezada por el secretario general del organismo, el chileno José Miguel Insulza.
El gobierno de Colombia admitió en esos foros que había violado la soberanía de Ecuador y se comprometió a no cometer nuevamente una acción similar, pero luego acusó a las autoridades ecuatorianas de connivencia con las FARC, lo que generó nuevos entredichos y aplazó la posibilidad de que las relaciones se reanudaran.(Telam)