José, a pesar de no haber sido tenido en cuenta dentro de los listados de los parte de prensa de la Dirección de Deporte de la Pcia. como ganador de una medalla de oro -más tratándose un niño especial-; en Fiambalá donde la gente lo conoce y lo aprecia, el pudo sentir el acompañamiento, cariño y ganas de seguir por parte de su familia, docentes, autoridades y pueblo en general, quienes conocen su conmovedora historia de vida.
Igual recibimiento disfrutaron los chicos de sub 14 y sub 16 de fútbol que obtuvieron excelentes puestos a nivel nacional, teniendo en cuenta la competitividad existente.
Es digno resaltar el entusiasmo, ganas y perseverancia que todos estos niños pusieron para competir a lo grande, a sabiendas que la escasez de recursos, fondos económicos y varios factores que muchas veces complica la preparación adecuada para un nivel competitivo tan alto.
Mas allá de los importantes logros obtenidos, Fiambalá celebra que niños que entrenan en un potrero, con arcos de cañas, en medio del viento zonda, con la falta de insumos, elementos, vitaminas, etc. Ponen todo para representar bien a nuestros pueblos.
La totalidad de ellos no entrenan en gimnasios ni terrenos adecuados. En varias oportunidades se los pudo observar en el Río Abaucán, entre medio del médano desarrollando actividades físicas, y que gracias a ese gran sacrificio pudieron regresar gloriosos, aplaudidos y en caravana en su pueblo que supo reconocer esta hazaña que quedará marcada en la rica historia de Fiambalá.
Gentileza: elabaucandigital.com