La gente del Comité Olímpico Argentino, con su segundo jefe de misión, Mario Moccia, a la cabeza, fue a recibir a los jugadores al aeropuerto para luego acompañarlos a la Villa Olímpica, donde se quedarán hasta el próximo jueves por la mañana.
Los dirigidos por Batista se mostraron fastidiosos con el viaje, que fue de poco más de 1 hora 40 minutos, no hablaron con los medios y se mostraron todavía con síntomas de cansancio luego del partido de ayer ante los australianos.
Un grupo de chicos chinos hizo guardia en la Terminal 3, la que se construyó especialmente para estos Juegos Olímpicos, para ver de cerca a Lionel Messi, pero se tuvieron que conformar con sacarle fotos desde muy lejos.
Al llegar a la Villa Olímpica los jugadores se sorprendieron por la imponente construcción que realizaron los chinos y se alojaron en un edificio ubicado en el sector A, estando un poco alejados del lugar donde se encuentran el resto de los deportistas argentinos.
Por la tarde, los jugadores harán movimientos livianos y habrá que ver si hacen el reconocimiento del estadio de los Trabajadores de Beijing, donde jugarán ante Serbia, o si al final van mañana.(Telam)