"Despedirse o no de la hinchada no genera nada, hay cosas mucho más profundas que corregir, como la violencia en los estadios. En el caso nuestro, no por tres o cuatro personas vamos a dejar de saludar a los hinchas que nos apoyan de forma sana", analizó el jugador en declaraciones al periódico La Tercera, de su país.
Fuenzalida, nacido hace 30 años en Santiago de Chile, está a préstamo en Boca (su pase pertenece a Colo Colo) hasta el 30 de junio y si bien no participó del partido ante River del jueves pasado que terminó en escándalo, ingresó al campo de juego y saludó al sector donde se ubica la '12', tal como se conoce al grupo más violento de la barra 'xeneize'.
Fuenzalida, muy relegado últimamente por el entrenador Rodolfo Arruabarrena, es muy probable que se desligue de Boca luego del 30 de junio, y además jugará la Copa América con el seleccionado de Chile en su país el mes próximo.
"Estos partidos son clásicos y todos lo viven de una manera muy intensa. Hablan de la gran final, de la gran guerra, a nosotros nos piden que ganemos, es lo primero que nos dicen cuando llegamos al estadio en el micro, pero todo tiene un límite", indicó Fuenzalida.
Fuente: Télam