"Viajo mañana a Madrid para hacer la revisión médica y firmar el contrato. Sólo faltan algunos detalles para cerrar la operación", le dijo Delfino a Télam mientras observaba el desarrollo de la segunda jornada de la zona B del 68vo. Campeonato Argentino, en el estadio de Atlético Echague, de Paraná.
Delfino (nacido el 29 de agosto de 1982 en Santa Fe), es el tercer argentino que vestirá la camiseta blanca del Real. El primero fue el tucumano Lucas Victoriano, quien llegó en 1998 y esta temporada regresó al club, y en 2000 se sumó el alero Ariel Eslava, cedido a un equipo de la Liga LEB.
"Me pone muy contento llegar a uno de los clubes más prestigiosos del mundo. Es un orgullo que se hayan fijado en mi teniendo sólo 19 años. Espero no defraudar a aquellos que confiaron en mí", afirmó durante la extensa charla.
Uno de los jugadores argentinos con más futuro y que hasta podría llegar a la NBA, viajará mañana acompañado por su padre, el ex jugador Carlos Delfino, y su agente, el cordobés Miguel Ferreyra.
Al preguntársele como es el contrato y por cuanto tiempo estará vinculado al club español, Delfino respondió que "es por dos años y con una opción para el Real de extenderlo por otros dos".
En estos años en Europa el jugador atravesó por etapas disímiles, pero siempre dejando el rótulo de jugador que está para grandes cosas. "En el primer año en el Reggio jugué como extranjero y realmente no me puedo quejar de como me fueron las cosas", comentó.
Los números de la segunda campaña en el Reggio asombran para un jugador de su edad: 13,5 puntos, 5,1 rebotes, 2 asistencias, 2,6 recuperos, un 80 por ciento de eficacia en tiros libres y de 60 en lanzamientos de dos.
Su ilusión en el Real "es tener minutos en cancha. Pero también poder acoplarme a los sistemas de Sergio Scariolo, que se que es un entrenador exigente, para ir logrando la madurez y el crecimiento paulatino en un club de tanta envergadura y que juega los torneos más importantes".
Con todas sus ilusiones a cuestas, con su calidad y un carisma especial pese a su juventud e inexperiencia, el santafesino Carlos Delfino va nada menos que rumbo al Real Madrid, donde espera triunfar para luego pegar el salto a la NBA. Un sueño que, en su caso, no sería extraño que se convierte en una feliz realidad. (Télam).
