Passarella llegó en silencio al Hindú Club, donde se alojó el plantel de River bajo una celosa custodia policial que lo acompañó desde su partida de Córdoba y su posterior llegada a Buenos Aires.
En principio, los jugadores y el cuerpo técnico se alojarían en Pilar, pero la nulas ofertas hoteleras para albergar al plantel hicieron retocar la idea del itinerario principal. (Infobae)