Gordon, sin dudarlo, subió al volante, demoró unos minutos en agarrarle la mano al 147 y comenzó a acelerar para sacar con el auto a su camioneta, mientras una linga tiraba sin dar tregua. Finalmente, el ya bautizado showman del Dakar , famoso por sus saltos desde la rampa de salida debajo del Obelisco porteño, pudo seguir camino, aunque terminó 47mo. en la etapa, una llamativa coincidencia de números para él en esta jornada.
Desde que comenzó el tercer Dakar sudamericano abandonaron nueve participantes: dos de motos, dos de cuatriciclos, dos automóviles y tres camiones. 8Diario Panorama)