"No tengo nada para decir del juego de nuestro equipo. Simplemente, que siento verguenza", admitió con sinceridad Olikhver, ganador de la última Liga Mundial en Brasil.
El central de Rusia, que ganó tres medallas olímpicas de oro, 6 torneos ecuménicos y una liga mundial, descartó que el bajo rendimiento se relacione con el arribo tardío del plantel a la Argentina (lo hizo apenas tres días antes). (Télam).-