Al presidente de la República del Paraguay le decimos falsa alarma. Ayer, tras el baile del Ciclón a Boca, le sonó el celular en reiteradas ocasiones. Sus asesores presumían que otro niño tendría que reconocer. Pero no, tranquilo, hermano: estos son y serán hijos nuestros.
Respondiendo a la historia, San Lorenzo se despachó contra el xeneize, que parece que en este Apertura no tuvo banca, de ningún tipo. Ayer se notó. Y aclaramos: en Boedo no hace falta viagra.
En la jornada del domingo se extrañó la presencia de Román "acúsalo con tu mamá" Riquelme. Todo el mundo boquense se preguntará cuándo volverán los lentos. Parece que habrá que esperar.
Por último, desde Mundo Azulgrana queremos responder a las declaraciones del actual jefe de Gabinete Aníbal Fernández: la inseguridad no es ninguna sensación. Pregunten por el arco de Boca sino...
Fuente/ 26noticias.com.ar