En su primera reacción oficial a la tensión que vive el país, las Fuerzas Armadas afirmaron que "la continuidad de la crisis no beneficiará a ninguna parte y el precio de ello lo pagará toda la patria".
Según los militares, las diferencias por cuestiones ideológicas son comprensibles, pero si éstas llevan a "un choque o a un conflicto es un asunto que todos deben evitar".
"Respaldamos el diálogo nacional y la senda democrática seria y sincera sobre las causas y puntos en los que se discrepa, hasta llegar a un consenso que reúna a todos los componentes de la patria", agregó el comunicado.
Para hoy, está previsto el inicio del diálogo nacional convocado por el presidente egipcio, Mohamed Mursi, a la que no irán los principales dirigentes de la oposición no islamista.
Las Fuerzas Armadas destacaron que quieren "la unidad" del pueblo egipcio, por lo que pidieron a todas las partes "vigilar con mucha cautela los sensibles acontecimientos que se registran en el plano interno y externo para evitar evaluaciones y cálculos erróneos".
Para los uniformados, estas evaluaciones erróneas podrían impedir distinguir "entre lo que se requiere para solucionar la actual crisis y entre los principios estratégicos basados en la legitimidad jurídica y las bases democráticas acordadas para avanzar hacia el futuro".
Por último, las Fuerzas Armadas subrayan "su responsabilidad patriótica de preservar los intereses supremos de la patria y proteger los lugares vitales e instituciones públicas y los intereses de los ciudadanos".
Fuente: Télam