Con esa nota, publicada en el blog de la Presidencia, el gobierno de Dilma Rousseff rompió un silencio de dos días desde que Obama hiciera el anuncio, informó la agencia noticiosa DPA.
Entre los cambios prometidos por Obama figura el cese de la práctica de espionaje sistemático contra gobiernos "amigos y aliados", salvo que "haya una fuerte razón de seguridad nacional".
Después de que se supiera que Estados Unidos espió las comunicaciones electrónicas y telefónicas de Rousseff, la presidenta canceló el viaje que tenía previsto hacer a Washington en octubre pasado, cuando iba a ser recibida con honores de estado.
Además, presentó ante la ONU un borrador de resolución que pide protección internacional contra el espionaje. La iniciativa fue presentada por Brasil y Alemania, cuya canciller, Angela Merkel, también fue blanco de escuchas.
La mandataria brasileña utilizó asimismo el discurso de apertura de la Asamblea General de las Naciones Unidas para condenar duramente el espionaje, al que catalogó como una violación de derechos humanos.
Fuente: Télam