Los campesinos reclaman un mayor presupuesto para el sector, condonación de deudas, reducción del precio de fertilizantes y combustibles
Los campesinos reclaman el cumplimiento de los acuerdos logrados en septiembre del 2013, luego de un mes de protestas, sobre mayor presupuesto para el sector, condonación de deudas, reducción del precio de fertilizantes y combustibles, freno al contrabando e importaciones facilitadas por los tratados de libre comercio con Estados Unidos y Europa.
Las negociaciones se celebran en la sede del Ministerio de Agricultura, en Bogotá, desde donde el ministro Lizarralde informó que "hemos estado discutiendo alrededor del tema del crédito, la refinanciación y los insumos pero no hemos cerrado los puntos. El ambiente fue bueno, fue constructivo y seguimos trabajando".
Asimismo, explicó que una vez que concreten un acuerdo en los puntos discutidos, se abordará luego el tema de los TLC y la protección medioambiental que demandan los campesinos, quienes piden un mayor control al sector minero, citado por la televisora regional Telesur.
Por su parte, César Pachón, vocero de Dignidad Agropecuaria, la organización convocante de la huelga, declaró que se enfrentan posiciones muy diferentes: "Nosotros pedimos condonación de las deudas, mientras que la propuesta del Gobierno se basa en ampliar los créditos, cuando nosotros no tenemos cómo responder", precisó.
Igualmente, Pachón recordó que "estamos reclamando los cafeteros y los agricultores de Colombia que el Gobierno cumpla con lo pactado", en relación al supuesto incumplimiento, por parte de las autoridades, de los acuerdos alcanzados en septiembre pasado.
Desde el comienzo de la huelga, el lunes último, se produjeron 14 detenciones y 27 policías resultaron heridos en el levantamiento de bloqueos de rutas, que se produjeron en los departamentos de Santander, Tolima, Casanare, Boyacá, Huila y Cundinamarca.
Uno de los 27 policías heridos en los enfrentamientos recibió un impacto de bala durante un choque entre uniformados y agricultores en Huila.
"Estamos seguros de que (el ataque) no proviene de los campesinos, porque ellos no le disparan a los policías", dijo el ministro del Interior, Aurelio Iragorri, citado por la agencia DPA, quien afirmó que la protesta tiene motivaciones políticas por la proximidad de la elección presidencial del 25 de mayo, en la que el mandatario Juan Manuel Santos aspira a su reelección.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, dijo antes del comienzo de la huelga que los grupos guerrilleros estaban infiltrados en la organización de la protesta, lo que fue ratificado este martes por el fiscal general, Eduardo Montealegre.
Sin embargo, el coordinador del sistema de Naciones Unidas en Colombia, Fabrizio Hochschild, ha pedido al gobierno que no estigmatice la protesta social con afirmaciones de esa naturaleza.
Fuente: Télam
