Tras haber realizado diversos gastos para preparar la ceremonia, la fiesta y el alquiler de ropa y alimentos, el día de la ceremonia Danilo no se presentó y no ofreció ninguna explicación. La novia se quedó esperando a su prometido "toda impactada, con mucha vergüenza y sintiéndose humillada", según señala la sentencia.
Sabino informó posteriormente que no se casó porque la familia de la novia se oponía a la mudanza de la pareja de Magé (ciudad satélite de Río de Janeiro) hacia la capital carioca, donde él trabajaba. En su declaración, afirmó que ya había informado a la novia de que no se casarían y que ella aceptó los riesgos de continuar con los preparativos para la boda, aunque la relación ya había terminado, según afirmó el novio.
La jueza Cláudia Pires afirmó en su sentencia que "no hay ninguna prueba que la pareja rompiera su relación antes de la fecha de la ceremonia. La novia contrató diversas empresas, hizo todos los preparativos para la boda, como el alquiler del vestido de novia, sin parecer que supiera que la relación hubiera finalizado". La jueza agregó que por eso, "entiendo que la ruptura injustificada de la promesa en el día de la boda conlleva daños morales y patrimoniales, además de ser abandonada en el altar", según la agencia Xinhua.
Esta fue la segunda sentencia que dictan jueces de Río de Janeiro en pocos días. La semana pasada, otro juez condenó a un hombre a pagar 11.553 reales (unos 6.600 dólares) a su ex novia por haber terminado la relación.
