Samir relató que un vehículo utilitario -cargado con una tonelada y media de explosivos- se aproximó al puesto militar y los soldados, al ver que el conductor no tenía intención de detenerse, abrieron fuego matando al atacante y haciendo estallar el vehículo, informó la agencia de noticias EFE.
Sin embargo, la agrupación Wilayat Sina, la rama egipcia del EI, reivindicó el ataque y ofreció una versión diferente en un comunicado difundido en las redes sociales.
"Un león de los leones del Estado Islámico" atacó un campamento militar en el monte Al Yalala, en la provincia de Suez, afirmó Wilayat Sina.
Según el comunicado, el atacante hizo explotar el coche bomba que conducía dentro del campamento y provocó "grandes pérdidas", pero las Fuerzas Armadas "silenciaron los detalles de la operación".
El Ejército egipcio se enfrenta a grupos armados radicales en el Sinaí, quienes aumentaron sus ataques contra las autoridades desde el golpe de Estado que el 3 de julio de 2013 derrocó al entonces presidente, el islamista Mohamed Mursi.
Ante el aumento de los ataques, el gobierno se prepara para aprobar una controvertida "ley antiterrorista" calificada de "draconiana" por organizaciones como Amnistía Internacional (AI) que considera que la legislación "golpea el corazón de las libertades básicas y los principios de derechos humanos".
Para el vicedirector de AI para Oriente Medio y el Norte de África, Said Bumeduha, "la propuesta de ley antiterrorista expande ampliamente los poderes de las autoridades egipcias y amenaza los derechos más fundamentales de expresión, de reunión y de asociación pacífica".
El texto debe obtener aún la aprobación del Consejo de Estado y, finalmente, del presidente de la República, Abdel Fatah al Sisi, quien ejerce en estos momentos el poder legislativo debido a la ausencia de un Parlamento, hasta que se celebren elecciones.
El texto fue aprobado por el gobierno a principios de mes, poco después del atentado con coche bomba que acabó con la vida del fiscal general egipcio, Hisham Barakat, con cuyo nombre fue rebautizada hoy la conocida plaza cairota de Rabba al Adaweya.
La emblemática plaza fue escenario de protestas y acampes a favor del derrocado presidente Mursi hasta que en agosto de 2013 fueron desalojados violentamente por las fuerzas de seguridad egipcias.
Desde entonces, miles de miembros y seguidores de los Hermanos Musulmanes -declarada organización terrorista- fueron detenidos y condenados a penas de cárcel o incluso a muerte, como el propio Mursi o el líder de la cofradía, Mohamed Badie.
La agencia oficial de noticias Mena informó que el fiscal general interino egipcio, Ali Aimrán, trasladó hoy a 198 supuestos miembros de los Hermanos Musulmanes a un juicio militar tras acusarlos de atentar contra instalaciones públicas y estratégicas.
Según Mena, 90 de los acusados están detenidos y 35 de ellos reconocieron su pertenencia a "comités de operaciones especiales" de los Hermanos Musulmanes en las provincias de Guiza, vecina a El Cairo, y Al Garbiya, en el delta del Nilo.
Fuente: Télam