Puntualizó que no hay nada que temer porque "no es la primera vez que se intenta criminalizar el legado de Lula", a partir de declaraciones de un condenado por integrar una red de compra de votos de parlamentarios en 2005.
Para Oliveira, el procurador General de la República de Brasil, Roberto Gurgel, "puede mandar a investigar lo que quiera y no va encontrar nada", consignó la agencia Prensa Latina.
La posibilidad de que se investigue a Lula había sido lanzada ayer por el diario Estado de San Pablo, pero el procurador Gurgel emitió por la tarde un comunicado en el que negó que hubiera ordenado esa pesquisa.
Las versiones surgieron de denuncias del empresario Marcos Valerio, uno de los 25 condenados por el caso conocido como "mensalao", un esquema de sobornos instalado durante la primera gestión de Lula que involucró a políticos, legisladores y empresarios.
El gobernante PT desestimó los pronunciamientos de Valerio y alertó que se trata de una maniobra montada para conseguir una rebaja de pena y desprestigiar al ex mandatario.
Oliveira, en tanto, destacó este año el PT cumplirá 33 años "y una década en el poder", iniciada en 2003 con Lula y continuada ahora por Dilma Rousseff.
Fuente: Télam
