La audiencia ha sido calificada como "estrictamente privada" por Lombardi, lo que se traduce en que luego de la reunión no habrá una reunión con el secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, como es habitual en las visitas al Papa de los jefes de Estado.
El encuentro de Francisco y Castro es visto en el Vaticano como la antesala de un "histórico" viaje que hará el Sumo Pontífice en septiembre a Cuba y Estados Unidos, tras su intervención en el acercamiento entre ambos países anunciado en diciembre pasado.
Es probable que el encuentro sirva para pulir detalles de esa visita, que ni siquiera tiene todavía duración acordada, ya que por el momento sólo se conoce que será la primera etapa del viaje que llevará al pontífice a Estados Unidos el 22 de septiembre.
El propio presidente de Estados Unidos, Barack Obama, fue el encargado a fines de 2014 de anunciar el "rol determinante" de Francisco en ese entonces, un concepto que también usó Parolin en declaraciones a radio Vaticana.
"El papa me llamó personalmente y a Raúl Castro para resolver el caso de Alan Gross", confirmó Obama, mientras que el mandatario cubano también agradeció públicamente al Santo Padre por sus oficios en la reapertura del diálogo entre ambos países, reseñó esta semana Lombardi.
En el marco del 80 aniversario de las relaciones bilaterales entre Cuba y El Vaticano, que se celebra en este 2015, el encuentro es visto por los vaticanistas como "otra confirmación" del "rol de arquitecto" del acercamiento entre Obama y los Castro que ha tenido el Sumo Pontífice.
"Francisco es uno de los actores centrales de la política internacional. Y este encuentro ratifica su profesada ´cultura del encuentro´. El Papa ha dicho tantas veces: cuando hay problemas, entonces se debe aplicar el método del diálogo. Él prefiere tender puentes para derribar muros", aseguró a Télam un conocedor de las últimas intervenciones papales.
El gobernante cubano llegará a Italia desde Moscú, donde asiste este sábado a los actos del 70 aniversario del final de la Segunda Guerra Mundial.
Aunque Cuba y El Vaticano nunca rompieron relaciones diplomáticas, los analistas suelen resaltar especialmente en los 80 años de vínculo la "histórica" foto de la visita de Fidel Castro a Juan Pablo II en 1996, dos años antes de que el comandante recibiera al entonces Sumo Pontífice en el aeropuerto de La Habana, en el marco de una visita de cinco días a la isla.
Luego de 14 años de aquella visita papal, en en marzo de 2012 Benedicto XVI visitó Cuba, ya con Raúl Castro en el poder, por los 450 años de la conmemoración de la Virgen de la Caridad del Cobre.
Según recuerda el periódico italiano Internazionale.it, a finales de abril el cardenal Baniamino Stella, Prefecto de la Sagrada Congregación para el Clero y uno de los colaboradores más cercanos del Papa, hizo una visita de varios días en la isla, donde tuvo manera de tratar extensamente con Raúl Castro.
En un acercamiento a América Latina que será característico de Francisco en este primer semestre, luego de recibir a Castro, Francisco recibirá a la presidenta Cristina Fernández el 7 de junio, a la mandataria chilena Michelle Bachelet el 5 de junio y al ex presidente uruguayo José "Pepe" Mujica el 28 de este mes, antes de viajar en julio próximo Ecuador, Bolivia y Paraguay.
Luego de reunirse con Francisco, Castro visitará al Presidente del Consejo de Ministros de Italia, Matteo Renzi, en el Palazzo Chigi, sede del Gobierno, a las 11, hora de Roma.
Tras la reunión bilateral, ambos mandatarios comparecerán ante la prensa, informó este sábado la oficina de prensa del gobierno italiano.
Los últimos contactos entre Italia y Cuba tuvieron lugar en marzo, cuando el ministro de Asuntos Exteriores, Paolo Gentiloni, se entrevistó en La Habana con Raúl Castro y lo invitó a visitar el país.
Fuente: Télam