El apoyó por 524 votos a favor y 43 en contra la participación del Reino Unido en la acción contra el EI en Irak, luego de siete horas de sesión celebrada tras la cuarta noche de ataques aéreos contra posiciones de los yihadistas y la segunda de bombardeos a refinerías petroleras en territorio sirio.
En su discurso en la Cámara, el primer ministro, David Cameron, argumentó a favor de una futura expansión a Siria de la presencia británica.
Cameron afirmó también que estaba en el interés del Reino Unido sumarse a los bombardeos en Irak contra el IS, porque era esencial derrotar "la ideología venenosa del extremismo islámico", pero subrayó además que las tropas que combatirán sobre el terreno al Estado Islámico no serán británicas, sino soldados kurdos o el propio Ejército iraquí.
Fuente: Télam