Belaúnde fue recibido por una comisión de autoridades peruanas, encabezadas por el ministro del Interior, José Luis Pérez Guadalupe, y el procurador anticorrupción Joel Segura.
El empresario, que fue asesor del presidente Ollanta Humala en la campaña presidencial de 2006 y 2011, es investigado por presuntos delitos de "colusión (acuerdos empresarios que pueden impulsar acciones monopólicas), tráfico de influencias, lavado de dinero, peculado y asociación ilícita para delinquir en agravio del Estado peruano".
Antes de descender del avión que lo trasladó a Lima desde la ciudad de Juliaca, en la región de Puno, un grupo de médicos legistas y de fiscales subió a la aeronave para constatar su estado de salud.
Belaunde descendió después esposado y protegido por un chaleco antibalas, mientras se desplegaba un gran operativo de seguridad para trasladarlo hasta un tribunal de Lima, luego de sus afirmaciones, mientras permaneció prófugo en Bolivia, de que podría ser asesinado por sicarios.
El empresario, que fue asesor del presidente Ollanta Humala, es investigado por presuntos delitos de "colusión, tráfico de influencias y asociación ilícita para delinquir en agravio del Estado peruano"
En declaraciones a los periodistas, el ministro Pérez Guadalupe agradeció a Bolivia por haber "posibilitado esta captura" y remarcó que las autoridades de ambos países determinaron el "buen estado de salud" del detenido.
"Se han cumplido todos los protocolos de entrega en este caso de extradición", remarcó antes de indicar que acudió en representación del Ejecutivo peruano "para corresponder a esta amabilidad del gobierno de Bolivia."
El procurador Segura enfatizó, por su parte, que la condición legal de Belaúnde "es de un extraditado; no se le ha expulsado; esto debido a que el Estado peruano ha tramitado la extradición".
Dijo que cualquier otra denuncia que se presente contra el empresario "va a solicitarse y a tener el camino que corresponda, para que, como en este caso, sea admitida (por la justicia boliviana) y puesta a derecho".
Posteriormente, el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) decidió que el detenido ex asesor presidencial ingresara en el penal de máxima seguridad de Piedras Gordas.
Por otra parte, la primera dama de Perú y presidenta del gobernante Partido Nacionalista (PN), Nadine Heredia, se presentó hoy ante una comisión del Congreso peruano que investiga las presuntas actividades ilegales de Belaúnde, y dijo que su captura en Bolivia y entrega a las autoridades peruanas "bota por los suelos cualquier especulación que se haya tejido sobre que los gobiernos hayan tramado ocultarlo o que nosotros hayamos pretendido que se escape".
"Siempre hemos pretendido que dé la cara a la justicia de su país; es una vergüenza se escape de la justicia, y peor de dos países. Yo tengo muchas investigaciones, pero eso no quiere decir que me tenga que escapar de mi país: yo doy la cara", concluyó.
Fuente: Télam