El presidente admitió dificultades en las conversaciones entre los delegados del gobierno y de la organización guerrillera, y afirmó que el Ejecutivo está conciente de eso por los casi 50 años de conflicto armado interno que vive Colombia, según reportó la agencia de noticias DPA.
"Hicimos el esfuerzo y ahí vamos. Sabemos que siempre es difícil poner de acuerdo a dos polos que se han matado unos a otros durante tiempo, no es tarea fácil", indicó el mandatario en un encuentro cristiano en Bogotá.
El jefe de Estado destacó además los avances que su gobierno tuvo durante casi tres años de mandato y dijo que una de sus peticiones más frecuentes que le formula a Dios es mantener "la humildad" para "que el poder nunca" se le "suba a la cabeza".
Fuente: Télam